a alguien
Ay, delirio sin fin
me escribió en una noche ¿qué luna?
no hay más allá de mí
no salgo
este cuarto
no alumbra nada
aquella luz
la imagino
viene del negro opaco acartonado
toda la atención
tensión
no soy mi voz
ni mi cuerpo
ni mis sueños
ya no soy hoy
Ay, delirio sin fin
intento
fuera del pensamiento
el asombro en la sombra
el encuentro en la espera
pasa aquello que pasa
todo sucede en la ignorancia
ceguera y siego mis sentimientos
una celda con puerta automática
donde cómodamente me encierro
Ay, delirio sin fin
pareciera ser que de esto se trata
de hacerse el vivo
creyéndolo todo
cuando nada se siente
el alma entumida
tu voz cortada
cortando
dejando cicatriz en los tímpanos
como el maestro y la tiza en el pizarrón
dejándonos sordos
el estallar de un volcán subterráneo
Ay, delirio sin fin
déjame en paz
sigue avanzando
llega a tu tumba
a la que después habré de pasar
para recordarte
para subirte al lomo de mis hubieras
no vengas de nuevo a entregarme
tus cantos de nunca